Nadie sabe lo que tiene hasta que lo ve perder,
Ofelia mi madre siempre
Me decía eso, yo lamento no haber
Escuchado ese consejo, de toda manera jamás hubiera
Podido descifrar lo que me trataba de decir,
Un día tuve un accidente en una motora y desde
Ese día empecé a ver las cosas
De un modo distinto, jamás se me hubiera
Ocurrido pensar
Que lo que siempre me decía mi madre era
Un consejo que se
Estaba convirtiendo en realidad, menti al
Jurarlé a las autoridades policiales que no vi el
Árbol cuando tuve ese accidente, sé que
Rodé varios metros, cuando desperté mi moto
Yacía a mi lado, no me podía
Alzar, me había
Quebrado los huesos de mis piernas,
Un vecino del lugar fue
El que ayudo, él llamo a una ambulancia y entre varias personas me cargaron a un auto y me llevaron al
Hospital, como siempre la
Ambulancia llego tarde, yo
Ya estaba siendo atendido en menos de una hora,
Gracias a esas personas que
Estaban ahí, me hubiera ido peor sin la ayuda de ellos, mí
Novia y mi madre llegaron antes que me
Trasladaran a otro hospital, ya que
El especialista para atenderme lo
Que yo tenía estaba en otra parte,
Una vez que llegue a ese hospital, el médico me
Evaluó y ordeno que me llevaran a cirugía, ellas tuvieron que
Esperar afuera, al rato ambas
Salieron al cafetín a
Tomar un café, mientras esperaban,
Amaneció y yo todavía estaba en cirugía,
No les voy a negar, que fue grave el accidente, que resulto que
Perdiera mis dos piernas, el
Exceso de velocidad y mi juventud, pensé en que no me iba a
Ocurrir nada, pero me equivoque, entonces llorando con la noticia
Recordé el consejo
Que siempre me daba mi madre, entonces fue que lo entendí,
Únicamente secaba mis lágrimas, al rato mi madre y mi novia
Entraron al cuarto
Y lloraron conmigo, el día estaba
Obscuro, estaba lloviendo o llorando ¿también? No lo se
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